¿Cuál es el sello distintivo de una marca fuerte, y qué lecciones se pueden aprender de esos rasgos? Para responder estas preguntas, te describiremos 8 señales para identificar si tu marca es débil o fuerte. Así, podrás tomar las medidas necesarias para fortalecerla, o continuar el trabajo positivo que ya venías realizando.

1.  Evolucionas constantemente

Tener coherencia y un mensaje claro es excelente, pero aún mejor es desarrollar una marca que evolucione continuamente. Un gran ejemplo de esto es Apple, la cual nunca se conformó con una sola tendencia o producto exitoso, sino que hasta hoy en día está constantemente sacando mejores versiones de todos sus productos.

2. Tienes un enfoque en el cliente

No importa qué producto o servicio vendas, siempre debes enfocarte en atender a las personas, ya que son el núcleo de todo negocio. Los clientes son la fuerza que te impulsa, y todos tus esfuerzos deben dirigirse hacia ellos. Por esta razón, si decides realizar algún  cambio en tu marca, asegúrate de seguir brindando una buena experiencia al cliente.

3. Siempre proyectas autenticidad

El sello de cualquier marca fuerte es la autenticidad, ya que una marca que no sea genuina a los ojos de los consumidores dejará de resonar. Para ello, es necesario alejarse de las características y beneficios racionales de nuestros productos y servicios (que a menudo dictan nuestra estrategia de marca), y conectar con la parte emocional del negocio, a través de la historia auténtica que existe detrás de la marca.

4. Sabes contar una gran historia

Precisamente, el acto de contar historias actúa como una forma poderosa para darle vida a tu marca, ya que consolida los lazos con tus clientes al transmitirle los valores que representas. Una marca fuerte sabrá quién es su audiencia y creará una historia con la que se identifiquen. Esta deberá mostrar lo que haces y cómo lo haces, invitando al público a que también forme parte de ella.

5. Has abrazado un estilo de vida

Una buena marca se extiende más allá de su producto e incorpora un estilo de vida a su esencia. Red Bull es un excelente ejemplo de esta filosofía: en un mercado repleto de competidores, su marca de bebidas energéticas se define a sí misma al abrazar los deportes extremos y, por lo tanto, al representar un estilo de vida que busca la adrenalina.

6. Trabajas honesta e íntegramente

En la era de la información, los clientes se sienten más atraídos por las marcas que ponen a las personas por encima de las ganancias. Por ejemplo, muchas empresas admiradas facilitan hábitos de consumo más responsables al producir bienes de mayor calidad que sean asequibles, duraderos y que respeten el medio ambiente.

7. Buscas que tu marca sea atemporal

Una buena marca puede sobrevivir generaciones sin tener que cambiar demasiado su mensaje central. Si te fijas en Coca Cola, su nombre, sus colores y sus frases son tan relevantes hoy como lo fueron a principios del siglo XX. Para lograr este mismo nivel de perduración, evita las palabras o frases de moda que podrían desaparecer mañana.