¿Cuál es la mejor estrategia que pueden tener las empresas cuando intentan redefinir su imagen? Para ayudarte a responder esta pregunta, a continuación, te brindaremos las 5 principales recomendaciones que deberías tomar en cuenta antes de pensar en un cambio de marca:

1. Escucha a tus clientes

Al tratar de realizar modificaciones en tu identidad, es importante escuchar a tus clientes y descubrir en qué creen que se puede mejorar. Si piensan que tu marca parece demasiado antigua, es hora de hacerla más moderna. O tal vez piensan que parece demasiado profesional, y busquen algo más personalizable o amigable.

2. Sácale provecho a tus canales de comunicación

Analizar el desempeño de tus canales de atención al cliente, ya sea por teléfono, en persona o en línea, podría brindar más luces sobre los aspectos a cambiar en tu marca. Presta particular atención a lo que dicen los clientes sobre tu marca en las redes sociales, a través de la realización de encuestas, o de la observación de comentarios y otras interacciones, ya que a través de este medio las personas suelen expresar sus opiniones con menos restricciones que a través de otras vías.

3. Mantente abierto y abraza la incertidumbre

En este aspecto en específico, siempre ponemos como ejemplo el caso de Domino’s Pizza en Perú, que luego de una crisis digital que los hizo cerrar por un largo periodo, redefinieron la marca en todos sus vectores (comunicación, producto, entorno y comportamientos), abrazando la incertidumbre. Gracias a ello, hoy en día están volviendo a posicionarse en el corazón de los limeños.

4. Coloca a tu misión por encima de todas las cosas

Presta mucha atención al tratamiento de la imagen de tu marca en todos los niveles de la compañía. Ya sea que se trate de un empleado ingeniero, diseñador o representante de ventas, todos deben entender lo que la empresa se esfuerza por ser. Y esto se evidencia cuando, desde que ingresa a la tienda hasta que desempaqueta su nueva adquisición, el cliente también lo entiende.

5. Haz cambios de forma incremental

Empieza de menos a más: en la mayoría de los casos, tu marca debería seguir siendo reconocible como la empresa que era antes del cambio. Los ajustes sutiles a la voz o la estética de los productos pueden indicar un cambio importante cuando se implementan con una estrategia dirigida. Más importante aún: nunca dejes de investigar ni de entender cada vez mejor al mercado al que te diriges, en sus constantes variaciones y diversos matices.

Estamos seguros que con estos consejos lograrás una transición exitosa entre la primera versión de una marca lanzada al mercado, y otra con una identidad mejorada o más adecuada a las expectativas de nuestro público objetivo. ¡Atreverse a hacer un cambio necesario en el momento oportuno podría ser vital para el futuro de una marca nueva!