Existe una nueva forma de que las marcas conecten con el corazón de las personas sin interrumpir sus vidas de la forma tan invasiva y egocéntrica como lo hacía el marketing tradicional.

Hablamos del Branded Content, una técnica de posicionamiento que lleva contenido relevante para tu audiencia a través de diversos formatos (audio, video, texto, gráficas, etc.), permitiendo así que los usuarios formen parte de una historia interesante.

El Branded Content es entonces un territorio de narrativas que puede amplificar los valores de una marca al estar completamente enfocado en lo que es realmente importante para la audiencia.

La gente busca y dedica su tiempo a las marcas que les brindan contenido interesante y significativo para sus vidas, más allá de lo que ellas tengan que decir sobre sí mismas: ya  que el Branded Content no es publicidad, ni ningún tipo de promoción de productos.

Mientras que la publicidad es lo que la marca quiere decir sobre sí misma, el Branded Content es lo que el público quiere escuchar de la marca más allá de sus productos o servicios. No hay intención de venta a corto plazo: el trabajo se concentra en la fidelización del cliente a largo plazo para conseguir así un público cautivo que produzca ventas más seguras y estables en el futuro.

Abundancia de información con poco significado

Actualmente vivimos en un mundo donde hay cada vez más información pero paradójicamente, con cada vez menor significado. Sin embargo, cuanto más avance la ciencia, más prevalecerá lo humano en el interior de cada uno de nosotros, ya que la tecnología intensifica la necesidad humana natural de conectar emocionalmente a través de historias.

En ese sentido, antes de decidirte a lanzar una historia a través de todos los medios disponibles, tu marca primero deberá descubrir la clave de su autenticidad. Cuando la verdad de una marca está en sintonía con la verdad de sus usuarios a través de historias humanas, se crea valor, y se lleva la relación entre las marcas y las personas a otro nivel.

La gran revolución del marketing ocurre cuando una marca realmente se pone en el lugar de la gente. Para ello, debe abrazar el compromiso de representar a la sociedad de alguna forma, poniendo sobre la mesa de debate una conversación más amplia que sus propios productos: más orientada a las personas y menos centrada en las ventas inmediatas.

Se trata de encontrar el match perfecto entre el propósito de la marca y lo que es importante y verdadero para las personas, porque las buenas historias son más grandes que los productos, y humanizan las marcas. De esa forma, a partir de una estrategia de Branded Content bien planteada, estaríamos dejándole un gran legado a nuestra marca, basado en las ideas que representa y que decidió defender.